Lomas de Zamora

“Parte del aprendizaje es que hay que tomar cartas en el asunto”


El profesor Alberto De Magistris fue sin dudas la cara visible de la desigual lucha por la defensa del humedal de Santa Catalina. Una lucha que después de llegar a buen puerto deja una importante enseñanza para la sociedad toda.

Llegó el final para una larga lucha…
Bueno, si, ya hicimos un calculo del tiempo que nos demandó esta lucha y son más de cuatro años; cerca de mil quinientos días de trabajo ininterrumpido para lograr esta figura para el área Santa Catalina, tan buscada por la comunidad y tan necesaria para que ese espacio verde se proteja a futuro y no siga el proceso de degradación que lo estaba condenando.

¿Cuál es la evaluación y que queda por hacer de aquí en adelante?
Desde el punto de vista del marco legal lo alcanzado puede considerarse suficiente. El lugar antes era llamado reserva, pero nadie especificaba que parte lo era, cual no, cual si, había un desconocimiento y ningún papel que ratifique una protección en forma de reserva.

Si era un Lugar Histórico Nacional y Provincial, pero no son figuras apropiadas para proteger la naturaleza. Por eso con la Ley se buscó la figura apropiada para cumplir ese objetivo. Que la apertura a la comunidad este dada por un programa que pueda garantizar la conservación, la educación y las actividades nobles que ya se están haciendo en el lugar.

Una Ley Provincial es algo fuerte. Claro que siempre se va a requerir el monitoreo sostenerlo, ver como se puede mejorar, pero es muy bueno para empezar. Calculemos que estamos en un área sumamente urbanizada. No es estrictamente la primera área provincial urbana en el sentido de zonificación, la Reserva Hudson en Florencio Varela también se clasifica como un área urbana o suburbana y la de Punta Lara también está clasificada como urbana por su población adyacente, pero si es esta la primera reserva que está casi totalmente rodeada de gente.

¿Cuál es el derrotero a seguir con los terrenos de Covelia?
Eso está estipulado en la letra de la Ley. Ahora ya es un interés de la Provincia, porque hay una autoridad de aplicación que es Áreas Protegidas. Por la Ley 10907 cuando ocurre esto, que se declara reserva Natural un espacio del dominio privado, más allá de que siempre se ha cuestionado como la empresa obtuvo este lugar y como la Universidad Nacional de La Plata lo vendió, está todo estipulado.

Lo primero es enviarle una notificación al privado de que la tierra que está a su nombre se ha declarado como reserva y entonces el privado tiene la posibilidad de aceptarlo o no. Si lo acepta sigue siendo el propietario pero debe ajustarse a todo lo que implica tener una Reserva natural.

Hay actividades diurnas, y ocasionalmente puede haberlas nocturnas y con presencia de guarda parques. Pero las actividades son siempre con la finalidad de observar la naturaleza, no se puede llevar a cabo ninguna actividad industrial; residencial; ni nada por el estilo.

Si dicen que no, empieza un trámite de expropiación que también está estipulado por la Ley.

¿Qué ocurre con algunas construcciones que hay en la zona?
Ahora viene una etapa de tomar contacto con las autoridades de aplicación con la Ley. También se deberá realizar algunas zonificaciones, en parte por lo que hay sobre la tierra. Hay actividades educativas; gente viviendo que depende de la Universidad nacional de La Plata, que serían incompatibles con una Reserva Natural a secas, y por eso se prevé la figura de Paisaje Protegido que permite esas actividades pero impide que se destruya la naturaleza.

¿Cuál es el balance final?
Podemos empezar a hablar de ambiente. Es lamentable que haya sido necesario tanto movimiento de la comunidad, pero imagino también que es parte de un proceso que la comunidad debe aprender. Uno escucha muchas veces 'que los políticos…' pero ellos fueron antes de serlo parte de la comunidad que hoy siguen siendo, aunque con otros cargos. Debemos reconocer que acá fue una lucha teniendo varios contrarios. Un municipio cómplice, en contra, con una Secretará de Ambiente sin ninguna injerencia, la cual sigue funcionando hoy de esa manera; un Universidad de La Plata vendedora que nos ha difamado, que ha mentido; una empresa con una ambición poderosa; y en parte también debemos reconocer que la Universidad de Lomas de Zamora tampoco se involucró de manera fuerte, por eso esta lucha fue más que nada apoyada por la comunidad mientras muchas instituciones se mantuvieron al margen.
Podemos decir que ahora comienza una nueva etapa porque para cuidar el lugar esos mismos actores van a estar involucrados. La Universidad de la Plata sigue instalada en la mitad del predio, en lo que seguramente será un Paisaje Protegido; la de Lomas tiene su campus universitario que tendrá seguramente la misma figura y el municipio deberá seguramente participar en ciertas regulaciones, además de la norma provincial.

Obviamente que todo esto es una experiencia en lo ecológico ambiental para todos, pero también en lo social, porque esto nos lleva a pensar que era posible tener este espacio que es un bien jurídico colectivo para disfrute de todos y para la conservación de los ecosistemas. Estaba siendo destruido y obviamente si se pudo revertir eso es porque eran decisiones de personas, no hay un destino fijado para algo, hay que tomar cartas en el asunto esto es parte del aprendizaje que nos queda.

Otro tema que debemos destacar es el apoyo de los medios que fue muy importante. Como el de ustedes, El Pueblo Nuevo que le dio cobertura al tema durante estos cuatro años. Fue muy valiosa la difusión de los medios, especialmente los medios gráficos que fueron siguiendo el tema semana con todas las novedades. Ahora queda la parte más linda, como pintar los carteles que señalen la reserva natural, los distintos caminos y senderos, algo que debía haberse concluido hace muchos años, pero que afortunadamente se logró ahora.

 
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