Lomas de Zamora

“Los intendentes se han vuelto punteros busca votos del gobierno”


Rosendo Pedernera, concejal por la Coalición Cívica, candidato a la Jefatura Municipal, en dialogó con El Nuevo Pueblo. “Lo nuestro es apostar a la construcción de un proyecto político más allá de los resultados en las elecciones del 2011”

¿Cómo están viviendo estos tiempos ya lanzado como candidato a la Intendencia de Lomas por la Coalición Cívica (CC)?
El lanzamiento de la candidatura se debe a algunas cuestiones que se pueden puntualizar. Yo voy terminando mi segundo mandato de concejal y cuando asumí este mandato yo ya anuncié en una conferencia, que este era mi último período, porque no estoy de acuerdo con que ningún cargo, ni legislativo ni ejecutivo, se repitan.
También entiendo que es una forma de brindar mi conocimiento del municipio, por el trabajo en el Concejo Deliberante y todo lo que uno va acumulando y aprendiendo del funcionamiento del municipio.
En Lomas de Zamora y en general, las fuerzas políticas de la oposición carecen de una voluntad política de generar gobernando y esa es la idea fundamental para construir una propuesta ejecutiva.

¿Sobre qué aspectos principales se basa su oferta para con el electorado?
Fundamentalmente estamos abocados a la construcción de un proyecto político local, si bien somos de la Coalición Cívica, creo que este proyecto político tiene que tener características locales y principalmente en Lomas de Zamora que es un distrito tan emblemático, uno de los más grandes de la Provincia, con todas las deficiencias que tiene un distrito del Conurbano que está en los 850 mil habitantes y con situaciones muy graves. La falta de capacidad de las gestiones que pasaron por el municipio se ve en la falta de planeamiento estratégico; en la falta de obras públicas que tengan que ver con las demandas más profundas y centrales, y con situaciones que muestran asimetrías grandísimas, un centro que se parece cada vez más a Miami y periferias que no tienen ni agua potable; ni cloaca; ni servicios elementales. Para solucionar esto se requiere poner en la mesas de discusión a todos los sectores del distrito para elaborar un programa de gobierno que piense en la ciudad y en nuestra calidad de vida a corto, mediano y largo plazo. En este sentido una de nuestras propuestas centrales es crear desde el ámbito institucional una secretaría específica y un concejo social para el planeamiento estratégico de Lomas de Zamora. Un ámbito donde estén sentados además del municipio todos los sectores de la comunidad planeando las tareas centrales de infraestructura que necesita el distrito.

Ustedes están trabajando muy fuerte en varios sectores periféricos, uno de ellos el denominado Barrio Tongui, ¿cómo está la situación en ese lugar?
Nosotros colaboramos con el campo Tongui con los médicos que estuvieron en Cuba, ahí hay una unidad sanitaria, y con gente que hace tareas administrativas y de formación. Los problemas son los de la gran parte de la periferia de Lomas de Zamora. Hay una cifra que lo demuestra concretamente: en los últimos diez años la Provincia tuvo 900 asentamientos, de los cuales 22 son de Lomas y el 17 de Noviembre o Campo Tongui es el más grande la Argentina con entre 12 mil y 13 mil personas viviendo ahí, así que la política habitacional es una materia pendiente. Yo cuestiono el rol en que se dejaron encasillar los intendentes, porque el intendente de un distrito que tiene alrededor de un millón de habitantes es equiparable a un gobernador de una provincia o a un gobernador con una población equivalente a la de dos o tres provincias argentinas, y sin embargo los intendentes se han vuelto más un puntero busca votos del gobierno nacional que administradores de un estado municipal y esto de dejar librado al azar el crecimiento demográfico tiene que ver con no tener la capacidad de pensar políticas de estado, entre ellas la habitacional.
Hoy estamos en plena discusión de la expansión inmobiliaria en el distrito, esto puede hacer que en los próximos diez años lomas sea un distrito de un millón de habitantes con las mismas obras de servicios públicos que hace 50 o 60 años, sin que nadie de los que gobierna sepa parar la pelota y poner en discusión y en tela de juicio lo que es el tema de fondo siempre, la calidad de vida de los que habitan Lomas de Zamora.

Lomas de Zamora tiene la particularidad de estar cruzado por varios conflictos en los que cada uno de ellos sería digno de ser tomado en cuenta como central: la instalación de la Feria de La Salada; el tema del Riachuelo; el conflicto de Santa Catalina; los diversos proyectos de vecinos de separarse del municipio; esto que ya nos relataba del asentamiento más grande del país, ¿cómo se afronta la posibilidad de gobernar un municipio con estás múltiples problemáticas?
Lo primero que hay que hacer es romper con la corporación política que maneja Lomas desde el año ´83 a la fecha, y para que eso suceda el primer paso es que aparezca una nueva fuerza política con nueva gente y nuevas ideas, poniendo en la mesa de discusión cada uno de los problemas centrales. La corporación política de Lomas, con tres o cuatro familias que vienen gobernando el distrito, lo único que hicieron fue repartirse el poder político entre ellos, mientras que nuestra comunidad quedó librada al azar.
En cada uno de los temas que mencionaste recién estuvimos nosotros, los de nuestro bloque concejales aportando en la medida de nuestra fuerza a la solución de cada una de esas problemáticas. Nítidamente fuimos la única fuerza que hizo de Santa Catalina su bandera principal y estamos a un paso de lograrlo. Este año vamos a conseguir que el Senado provincial finalmente apruebe la creación de la Reserva.
También es cierto que hay muchos vecinos, los de La Franja; de Banfield, que están trabajando por la división del distrito, y yo les digo que con este sistema político dividir el distrito en dos, tres o cuatro, es multiplicar los problemas. No cuestiono el proyecto de división del distrito, que son cosas para discutir, pero propongo que el mismo municipio implemente medidas de descentralización para que determinadas zonas de Lomas de Zamora puedan administrar su propio presupuesto.
Una de mis propuestas es regionalizar el distrito en cuatro zonas, que son Lomas Centro y parte de Cuartel IX; Banfield; el resto de Cuartel IX con la zona de Villa Independencia y La Franja, con Llavallol; Turdera; Temperley y San José, y crear la figura de una especie de vice intendentes que tengan un presupuesto anual asignado y con departamento contable propio, con lo que naturalmente la descentralización administrativa se va produciendo eficientizando los recursos para cada una de las zonas y eventualmente encaminar el planteo de la división de alguno ellos como los que tienen ya propuestas históricas como es el caso de La Franja. Esto en lo hechos eliminaría las delegaciones municipales que son descentralización de ficción, porque en la realidad un delegado resulta apenas equivalente a un director municipal sin capacidad de gestión propia y ningún grado de autonomía, siempre rogando algún suministro a algún secretario, con lo que no cumplen ninguna función de descentralización administrativa.

¿La ley orgánica de las municipalidades permitiría esto?
Existen varias herramientas que permiten descentralizar presupuestos y hacerlos más o menos autónomos, por ejemplo los Institutos. Lomas de Zamora tiene el Instituto Municipal del Deporte, el Instituto Municipal de la Producción y del Comercio Exterior y el instituto Municipal para la Discapacidad, que tienen la aprobación del Concejo Deliberante y un presupuesto asignado anualmente, es decir que tienen cierto grado de autonomía financiera siempre que la administración central sea la del Municipio. Lo que pasa es que la descentralización política y administrativa no es algo que se pueda hacer de un día para otro, es algo que se va naturalizando con la práctica.
Yo creo que la estructura técnico jurídico del municipio, centralizado como está, con lo grande que es Lomas y la cantidad de problemas que tiene, es lo que lo hace ineficiente.
Hay que empezar a transitar este camino de la descentralización, además en el marco de una participación de la comunidad, porque en cada uno de los barrios va a haber discusiones que tengan que ver con las necesidades centrales de ese barrio o de esa zona. Dividiendo el municipio en regiones con cierto grado de autonomía también acerca la capacidad de decisión a los propios vecinos y es básicamente lo que hoy no existe, es lo que hoy deciden dos o tres personas, desde el macro presupuesto hasta si mandan o no una pala mecánica para limpiar una calle.

¿Cómo ve en particular el proyecto de La Franja o Municipio de Temperley, ya que es el que está más avanzado?
Ahí hay una diferencia si se quiere conceptual. Hay muchos vecinos que sienten un abandono por parte del municipio de Lomas, pero es una especie de ficción creen que la división automáticamente soluciona los problemas. No es cierto que automáticamente los municipios más chicos se administran mejor, porque con ese criterio los países más chicos se administran mejor. Podríamos hacer una equivalencia con el pensamiento sarmientista de para que queremos la Patagónia, que un país más chico sería mejor. No es así y eso es una ficción. Lo que hay que encarar seriamente es con cuáles elementos se administra mejor un estado y hacer que tenga un ida y vuelta más dinámico con la gente. A mi criterio esto se logra naturalizando la descentralización y en segundo lugar, que es una pelea que tendremos que dar toda la dirigencia política en el Conurbanos, los que gobiernan y los que no, y es plantear de una vez por todas que los distritos grandes del Conurbano tienen que tener autonomía financiera, para que paulatinamente tengan la capacidad de recaudar y administrar un presupuesto desde el estado municipal acorde a la cantidad de habitantes y las necesidades de infraestructura, sino vamos a seguir teniendo intendentes que más que jefes de estado son punteros junta votos que andan mendigando por Provincia o por Nación que les den algún peso más de coparticipación o algún fondo especial para hacer alguna obra pública.
En general se ha visto en los últimos años en Lomas y en todo el Conurbano que las obras de infraestructura vienen con la empresa adjudicada; con montos establecidos y hasta con proyectos aprobados más allá de las necesidades de los propios vecinos. Por eso obras importantes como la canalización del Arroyo del Rey o los aliviadores que surcan Fiorito y Cuartel IX, han sido modificados por los reclamos del Foro Hídrico y no por el Intendente, porque finalmente es la propia comunidad la que termina planteándole al Ministerio de Infraestructura nacional cuales son las obras que se tienen que hacer en el distrito, porque el intendente no termina asumiendo esa responsabilidad.

En el plano netamente político, en las últimas elecciones que tuvo que afrontar la Coalición Cívica – ARI, se notaba que se traccionaba desde lo nacional hacia lo local. En esta elección da la impresión que esto no va a ser así.
Estamos viviendo un momento de transformación de todo el panorama electoral.
Desde nuestro sector, el Acuerdo Cívico, que en términos nacionales resultó ganador en el 2009, la evolución de la interna radical terminó tirando por tierra esa situación.
Hay que reconocer que hubo una audacia muy grande del gobierno nacional con algunos temas como la Ley de Medios; el Ingreso Universal; la Ley de Matrimonio Igualitario, que tuvieron una dinámica política mucho más precisa que la de la oposición.
Hoy está todo por verse. Vivimos un momento donde se está reagrupando el oficialismo y los distintos sectores de la oposición, y no me animaría a decir en que lugar va a salir cada uno.
Nuestra impronta a nivel local tiene que ver que los sectores de la oposición hace muchos años que no construyen referencias ejecutivas en los distritos grandes del Conurbano. No han sabido construir referencias ejecutivas y es por eso que nuestra idea es diferenciarnos en este sentido. Lo nuestro es la construcción de un proyecto local que tiene nítidamente que ver con los problemas y las demandas que hay en Lomas de Zamora, y eso es apostar a la construcción de un proyecto político más allá de los resultados en las elecciones del 2011 y que vaya configurando el objetivo.
Eso no se hace solo desde el ejecutivo sino también desde el llano. A nosotros nos permite pararnos en esa impronta el haber estado en la vereda de enfrente todos estos años y haciéndonos eco de cada una de las demandas de la comunidad.

 
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